La dirección de la empresa ha transmitido a los jefes de departamento la propuesta económica que nos han presentado durante la negociación de esta semana y, por lo tanto, nos vemos obligados a dar nuestro punto de vista para que nadie os engañe y para que veáis que se trata, literalmente, de una tomadura de pèlo. Según la dirección, nos proponen un aumento de un 4,46% y esto es rotundamente falso. Esta cifra incluye el IPC español, que han calculado en un 3,5% (totalmente hipotético) y otras mejoras (creación de un fondo social; incremento de la compensación por festivo trabajado -sólo la opción únicamente económica-; un plus de horario de fin de semana de unos 60 € al mes; aumento del precio de las dietas; dos vales para comedor al mes, en lugar de uno; y una mejora para los trabajadores de los niveles A y B).

Por tanto, en definitiva, el incremento salarial real que nos proponen es un magnífico 0,3%. Una cifra indignante. Ya sabíamos que no querían concedernos la equiparación, pero esta oferta !es para reir… o para llorar! Este suculento incremento nos lo garantizarían para los próximos cinco años, que es el período que quieren que dure el convenio. Sería una cifra que se revisaría a la baja en cada convenio para que nos acercáramos al sueldo de TVC en cifras porcentuales, pero nunca absolutas. Esto supondría que al cabo de 30 años la diferencia actual, que seguiría siendo la misma, ya no sería tan importante. Igual como hace 30 años, que una barra de pan no costaba lo que hoy.

Nosotros no estamos dispuestos a aceptar esta oferta miserable y menos después del éxito de nuestra huelga. Esta proposición, que según la dirección nos haría abandonar los paros de manera inmediata, lo único que ha provocado es irritarnos aún más. Y ellos ya han asegurado que se trata de una oferta innegociable e inamovible. Por lo tanto, la brecha de esperanza que se abrió el lunes se está cerrando sin remisión. Quedan menos de 48 horas de márgen y, si no hay ninguna novedad, el próximo lunes !!!volveremos a salir a la calle!!!

Barcelona, 1 de junio de 2005