La Coordinadora Estatal de Comités de Empresa de Grupo Zeta ha informado que ante la actitud de la patronal en la mesa de negociación estas se han suspendido y ha emitido el siguiente comunicado:

Después de celebradas cinco reuniones de las diez que como mínimo deberíamos tener durante el periodo de suspensión del ERE (días 15, 16, 18, 20 y 21 de enero) la empresa no ha cumplido el acuerdo al que se llegó en la Consellería de Treball. En éste, concretamente en el punto tercero, se comprometieron a rebajar el número de afectados por el expediente. En lugar de ello y reunión tras reunión, se han ido incrementando los números de cada una de las empresas, en algunos casos de una forma más que ostensible llegando casi a duplicarlos

No se nos ha entregado la información requerida que debe servir para definir exactamente la estructura actual y futura del Grupo ni se han atendido las peticiones de número de personal afectado dentro y fuera de convenio desglosándolos por empresas, departamentos y categorías. Sin ello nos es imposible trabajar en la defensa de los puestos de trabajo en las mismas condiciones de las que dispone la empresa para justificar las salidas por lo que nos sitúa en una posición de indefensión frente al expediente. Lo único entregado por parte de la empresa han sido los censos con departamentos, información que se nos ha facilitado hoy cuando ya están consumidos la mitad de días que tenemos antes de volver a entrar en el periodo de consultas del ERE.

En las cinco reuniones hemos abordado ya las áreas de Prensa, Revistas y Publicidad además de una parte de las plantas de Impresión sin haber logrado ningún avance significativo. La sensación general ha sido que la empresa solo pretendía cubrir el trámite de cara a la galería, convirtiendo la negociación en una mera fase informativa sin pretender entrar nunca al detalle de las causas reales que motivaban las salidas ni aceptar ninguna de las soluciones alternativas al plan que proponía la representación de los trabajadores, ante todas las cuestiones la única respuesta ha sido el silencio o la evasiva directa.

Tal es así que tampoco se ha podido llegar a acuerdos a la hora de elaborar las actas de las reuniones efectuadas, la empresa no quiere que se manifiesten sus respuestas de manera literal, reservándose el derecho a omitirlas o clarificarlas según les convenga. Muchas de estas respuestas son de suficiente calado para poder interpretar que el Plan de Futuro del Grupo no tiene solidez y que la empresa desconoce como se va a afrontar el día de mañana. Las respuestas de la representación de la empresa siempre han sido ambiguas e insuficientes para justificar que deba haber salida alguna de personal ya que ante la pregunta concreta efectuada en todas las reuniones sobre como se iba a hacer el trabajo sin las personas que abandonasen el Grupo nunca ha habido una respuesta real ni seria, siendo todas ellas del tipo: «ya se verá…», «lo estamos estudiando», «ahora no podemos responder a esta pregunta», «se hará lo que se pueda», etc, y algunas con malas maneras. La única acta firmada por ambas partes ha sido la primera, en la que básicamente se trataba de hacer un calendario de reuniones y establecer la composición de la mesa negociadora que estaría presente en todas ellas.

Por todo lo expuesto hemos propuesto a la empresa en fecha 22 de enero que aceptáramos nuevamente una mediación del Departament de Treball de Catalunya pues no se cumplían ni la buena fe negociadora ni la obligatoriedad de la empresa para rebajar personal afectado. Como ya esperábamos, la empresa se ha negado en rotundo a que un tercero «neutral» medie en este conflicto.

Ante su negativa hemos interpelado directamente al Director General de Relaciones Laborales del Departament de Treball, señor Salvador Álvarez, que fue el encargado de proponer el acuerdo de mediación del pasado 12 de enero y por lo tanto el máximo responsable de su correcto cumplimiento. Nos ha atendido y confirmado que intentará aproximar la posición con la empresa, pues nosotros le hemos manifestado que no podemos seguir con este formato de reuniones en las que cada vez tenemos más afectados, menos explicaciones serias y menos resultados positivos para los trabajadores.

22 de enero de 2009