La Federació Internacional de Periodistes (FIP), en colaboración con la organización Statewatch, ha elaborado un informe sobre Periodismo, libertades civiles i lucha contra el terrorismo. De este trabajo, se concluye que la lucha contra el terrorismo ha provocado considerables retrocesos en las libertades civiles, entre ellas el de los derechos a la información y a la libertad de expresión. Según el documento, «la respuesta de los gobiernos a la amenaza del terrorismo está fuera de toda proporción y se ha convertido en un reto devastador para una cultura global de derechos humanos y libertades civiles, establecida hace casi 60 años». El secretario general de la FIP, Aidan White, afirma que «se está creando una atmósfera de miedo y incertidumbre y las libertades civiles se hacen añicos, incluso en países con una reputación de tolerancia y pluralismo». El director de Statewatch, Tony Bunyan, asegura que muchas de las medidas adoptadas contra posibles ataques «tienen poco o nada que ver con el combate contra el terrorismo y corremos el riesgo de dormirnos dentro de una sociedad vigilada, en la que los valores democráticos que se habían garantizado son sacrificados en la guerra terrorista».
Entre las conclusiones del informe se dice que «los medios y el periodismo independiente sufren una penetrante atmósfera de paranoia que lleva a peligrosos niveles de autocensura». También explica que «se restringe la disensión» dentro y fuera de los medios y que «los poderes socavan los estándares democráticos, porqué son introducidos en procesos solapados y muy secretos y que están fuera de la órbita de la responsabilidad parlamentaria». En la web de la FIP (www.ifj.org) se puede encontrar el informe en inglés, francés y castellano.