Por la prórroga del convenio hasta alcanzar un acuerdo

Los trabajadores de TV3 no debemos caer en las provocaciones de la dirección de la CCMA, que quiere aplicar un recorte directo a nuestros sueldos utilizando la amenaza de la pérdida de ultractividad del Convenio para imponerla.

Por eso tenemos que actuar con inteligencia, que no está reñida con la contundencia. Debemos desarmar la pretensión de la dirección de limitar la negociación colectiva a una nueva rebaja del sueldo, presentada demagógicamente como «equiparación» con los sueldos de un convenio de la sanidad pública.

Y hemos de plantear las rebajas alternativas de gastos prescindibles ante los argumentos que hay que enjugar de golpe, y no en cuatro años como se desprendía de los acuerdos del PAC, el déficit de 2013, provocado por una aportación insuficiente del Gobierno. En resumen, debemos forzar la negociación que Brauli Duart no quiere hacer, para justificar así una rebaja unilateral de los salarios.

También necesitamos serenidad, y no apostar sólo por la movilización reactiva como única salida a las provocaciones del Presidente de la CCMA, que actúa por órdenes del Gobierno, y aplicando un plan perfectamente orquestado. Debemos combinar movilización y negociación como siempre hemos hecho, haciendo más presión en los momentos clave.

Tenemos convocadas huelgas de 12 y 24 horas el 27 y el 30 de enero, que deben influir en la mesa de negociación. Pero jugárselo todo a una huelga indefinida, sin saber cuál será el movimiento definitivo de la dirección a partir del 31 de enero no tiene sentido y es descubrir nuestra estrategia, que siempre debe dejar un margen de movilización y negociación sin que se estropee el proceso .

Por eso hay que retrasar la decisión colectiva sobre huelgas globales hasta después del día 31. Y obviamente se tiene que hacer a través de referéndum, porque la decisión tiene unas implicaciones mayores aún para la plantilla que cuando lo hicimos para votar paros parciales o el cese de Brauli Duart.

Nosotros consideramos que tenemos que imponer la negociación en ámbitos que la dirección no acepta, pero que no tendrá más remedio que admitir, si no quiere tener un follón considerable, como ocurrió en el proceso de negociación del PAC, donde según Brauli Duart todo era intocable y sólo nos quedaba el camino de la resignación.

Si la dirección realmente quiere disminuir el déficit que nos vende, y hacer más competitiva la empresa, y quiere aprovechar la crisis para salir de ella en mejores condiciones, los representantes de los trabajadores tienen derecho a examinar y negociar sobre otras partidas y gastos que no sean exclusivamente el salario de los trabajadores.

PORQUE CUANDO SE TOCA HUESO, NO SE PUEDE CONTINUAR HURGANDO!
PREPAREMOS BIEN LAS HUELGAS DEL 27 Y DEL 30 DE ENERO
SOLO UNIDOS Y CON ACCIONES MASIVAS PODEMOS EVITAR LOS NUEVOS RECORTES