Clausurado en Granada el II Congreso del Sindicato de Periodistas de Andalucía
La asamblea del II Congreso de Periodistas de Andalucía insta a los empresarios y propietarios de medios de comunicación a que reconozcan los derechos laborales de sus trabajadores en situación irregular y los derechos profesionales a través de estatutos y de comités de redacción. Sólo así se podrá garantizar la libertad de los profesionales para informar con veracidad e independencia. Esta es una de las resoluciones aprobadas esta tarde por el II Congreso de la organización andaluza, al que han asistido cerca de un centenar de profesionales de la Comunidad. En el encuentro, celebrado en la Fundación Euroárabe, han participado también, entre otros, los decanos de las facultades de la Comunicación de Sevilla y Málaga.
Otra de las decisiones adoptadas por el Congreso ha sido la de potenciar un acuerdo con las facultades de comunicación andaluzas para desarrollar, en el marco académico, acciones informativas y explicativas sobre la situación laboral de la profesión periodística. El objetivo de estas acciones es acercar la realidad profesional a los futuros periodistas para que tomen conciencia del riesgo que se corre aceptando las condiciones existentes en el actual mercado de trabajo.
El Congreso del SPA se muestra asimismo muy preocupado por la derivación de los diversos consejos existentes en Andalucía como órganos de control o dirección en los medios de comunicación públicos. Aunque los estatutos de creación recogen claramente respecto a su composición la elección de personalidades de relevancia social para conformarlos, cada vez más estos consejos, tanto asesores como de administración son el refugio de políticos desplazados de puestos de poder o de representación, de profesionales del periodismo vinculados directamente a los partidos políticos o de otros tipos de servidumbres que desnaturalizan el control social que se atribuye a estos órganos.
Asimismo, el SPA celebra que la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea adjunta a la Constitución Europea recién aprobada tenga rango de Ley Fundamental. Sin embargo lamenta que el derecho a la información no esté recogido en ella de forma explícita sino como dependiente de una genérica referencia a la libertad de expresión y de información, lo que representa una defensa de la libre empresa pero no garantiza el derecho de los ciudadanos a la información. Ello supone un retroceso con relación a la Carta Universal de Derechos Humanos y a las Constituciones democráticas de los estados miembros, entre ellas la española.
Por otro lado, el II Congreso del Sindicato de Periodistas de Andalucía insta a la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) a que haga pública a través de internet y de todos aquellos medios que considere oportunos una información actualizada sobre las vinculaciones económicas, políticas o de cualquier otro tipo de los propietarios y gestores de los medios y de los grandes grupos de comunicación, públicos o privados, que puedan influir en su línea editorial. El SPA considera esta información de vital importancia para que el ciudadano pueda saber en todo momento quién está detrás de los medios de comunicación.
La Asamblea del II Congreso ha renovado la junta ejecutiva del SPA, a cuyo frente continuará como secretaria general la periodista granadina Lola Fernández Palenzuela. Componen el resto de la ejecutiva Guillermo Polo, Susana Aragón, Rafael Contreras, Francisco Terrón, Clara Aurrecoechea, Salvador Rivas, Antonia Merino y Charo Valenzuela.
La asamblea del II Congreso ha transcurrido en un clima de profundo debate y reflexión sobre al situación laboral y profesional de los periodistas, y ha contado entre los asistentes con el redactor del Código Europeo de Deontología, Manuel Núñez Encabo, el secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), Enric Bastardes, el presidente de de la Federación de Asociaciones de la Prensa de Andalucía (FAPA) Santiago Sánchez Traver, y representantes de los sindicatos de periodistas de Madrid, La Rioja, Canarias y Catalunya.
Granada, 19 junio de 2004