El Pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado este martes, con los votos en contra del Partido Popular y la abstención de Convergencia i Uniò, la propuesta de Izquierda Unido de crear un Estatuto del Periodista Profesional para garantizar los derechos laborales y la independencia de los periodistas, a fin de hacer realidad la libertad de información consagrada en el artículo 20 de la Constitución. Votaron a favor de la propuesta de IU un total de 112 diputados, de los grupos de IU, PSOE y Mixto. En contra hubo los 158 del PP y 15 abstenciones, de CiU.

El portavoz de IU en el Congreso, Felipe Alcaraz, argumentó que actualmente «no existen cortapisas a la patología de la concentración», no está regulado el secreto profesional, no existen consejos de redacción, ni un control real de los medios públicos de comunicación, que, a su juicio, «deberían servir de liderazgo comunicativo».

Recalcó que la falta de desarrollo del artículo 20 de la Constitución hace que éste no pase de ser «una declaración retórica», pues sólo se ha regulado la cláusula de conciencia, pero de manera «anémica», con lo que carece de eficacia. Acusó al PP de impedir este desarrollo por su actitud «ultraliberal», contraria a regular, con lo que estamos «ante la ley de la selva comunicativa», y advirtió de que, si no hay independencia de los periodistas, no hay información objetiva en ningún país, y en éste no está legislada».

El diputado del PSOE Luis González Vigil recordó que su grupo ya presentó una Proposición No de Ley en este sentido, que fue rechazada por el PP, y saludó la iniciativa de IU, porque «España es el único país de la UE» que carece de una regulación específica de la profesión periodística. A su juicio, es necesario aclarar la figura de la cláusula de conciencia y del secreto profesional, así como ordenar las relaciones de los periodistas con los propietarios de los medios de comunicación, todo ello con el fin de mejorar la «independencia de los informadores como mejor garantía de la calidad» de la información que reciben los ciudadanos.

Indicó que, si el PP vota en contra de este tipo de iniciativas, es porque «en el fondo le tiene miedo a la prensa, al periodismo libre», y por ello en estos años «ha puesto en marcha de forma descarada y casi escandalosa la mayor operación de manipulación informativa», ha facilitado a sus «amigos» la compra de medios para apoyar la «propaganda» del Ejecutivo, y ha hecho «favores» a los medios afines.

Asignatura pendiente

En nombre de CiU, Pere Grau defendió la necesidad de encontrar «entre todos» una solución para la situación de los periodistas «a la pieza» y ‘freelance’, pero recalcó que para ello es precisa una negociación con los empresarios, que debería haber sido uno de los elementos para configurar las bases de esta Proposición de Ley.

Confió en que en la próxima legislatura los grupos parlamentarios sean «capaces de aprobar una asignatura que en esta legislatura no vamos a aprobar», por lo que «tendremos que repetir». Tras abogar por una Subcomisión que estudie a fondo la cuestión, indicó que lo deseable sería presentar la próxima semana una Proposición No de Ley consensuada para pedir al Gobierno un compromiso explícito, fuera de objetivos electorales.

El portavoz del PP en la Comisión de Control de RTVE, Alejandro Ballestero, explicó que su grupo votaba en contra de la iniciativa porque, «después de desmenuzarla, creo que crearíamos más problemas de los que vamos a resolver», no sólo por cuestiones formales, sino de fondo, pues afecta a normas de carácter orgánico.

Ballestero recalcó que, ante la independencia de los periodistas, existen «dos enfoques», el del PP, que es el «liberal», y el que apuesta por la regulación, que consideró «absolutamente pesimista, no confía en las personas, en la sociedad, en los profesionales». El diputado popular concluyó que, gracias al Gobierno del PP, hay «más libertad, más transparencia y más medios de comunicación», y los españoles «no tienen que plantearse debates artificiosos e irreales como el que se ha traído a esta Cámara».

El SPC lamenta una vez más la actitud mostrada por el Gobierno del PP, insensible a los vientos que soplan de toda Europa, que hace años que han regulado la figura del periodista profesional en la línea de lo que establecen las respectivas legislaciones democráticas. El Sindicato de Periodistas de Catalunya insta a todos los grupos parlamentarios que tengan el cumplimiento del artículo 20 de la Constitución como una de les cuestiones prioritarias para la próxima legislatura y pide al conjunto de la profesión que tenga en cuenta la negativa del PP a resolver los problemas del sector en el moment de decidir su voto en las próximas elecciones legislativas del mes de marzo.