El Observatorio Crítico de los Medios Media.cat ha elevado hasta 38 la cifra de profesionales de la información víctimas de la violencia en las divstintas manifestaciones de esta semana en Catalunya después de la sentencia del Tribunal Supremo sobre el procés. Con relación al balance que publicábamos ayer tenemos que añadir que el martes 15 finalmente fueron once los casos (que inicialmente se cifraba en diez), y que el miércoles 16 fueron 13 (que con los primeros datos decíamos que eran nueve). Además hay que añadir los dos casos detectados hasta ahora sucedidos anoche.
Empezando por los dos últimos, un equipo de Telecinco ha sido agredido por manifestantes de extrema derecha en la plaza Artós de Barcelona. Los ultras los han roto la cámara y les han insultado y amenazado. Este tuit es testigo de los hechos. En la posterior contra manifestación antifascista se lanzó pintura contra los cuerpos policiales y una parte de ella fue a parar a la cámara de un equipo de Cuatro que quedó dañado. También ayer jueves un periodista de El Periódico, Carles Márquez, recibió un disparo de foam a la pierna desde una furgoneta policial mientras estaba con un grupo de periodistas identificados con el resultado que tuvo que ser atendido por los servicios sanitarios.
Con relación a miércoles 16, el comité de empresa de la ACN ha denunciado varias agresiones sufridas por periodistas de la Agencia en distintos puntos del territorio. En Girona, un redactor recibió impactos de objetos lanzados contra la Policía. Dos más tuvieron que ser atendidos en Barcelona después de respirar gases. El último caso detectado el miércoles 16 fue para otro colaborador de la televisión comunitaria La Mosca TV, que recibió una bala de foam de los Mossos. El comité de empresa de la ACN también es quien denunció el último caso registrado el martes 15, que afectó a un redactor en Sabadell que resultó herido por piedras lanzadas durante las protestas.
En varias manifestaciones, el trabajo de los y las profesionales de la información se vio alterada por el acoso de algunos manifestantes. En las protestas independentistas lo fueron principalmente medios españoles con el grito de «prensa española, prensa manipuladora». Periodistas de algunos de estos medios se vieron forzados a abandonar los lugares donde estaban. En cambio, en las manifestaciones realizadas por la ultradreta española el acoso a informadores fue más generalizado contra todo el colectivo. El SPC hace una vez más un llamamiento a respetar el trabajo de los profesionales de la información que intentan cumplir con su tarea de informar a la ciudadanía de todo aquello que sucede.