La Federación Internacional de Periodistas (FIP) ha advertido que los medios de comunicación y los periodistas siguen siendo objetivo principal de los extremistas políticos, de delincuentes y terroristas, al informar de que -al menos- 94 periodistas y empleados de los medios murieron en 2010, víctimas de asesinatos, ataques con bombas o incidentes de fuego cruzado entre distintas facciones. A esa cifra, se suman también tres periodistas que tuvieron una muerte accidental, pero relacionada con su trabajo.

La FIP ha hecho pública la lista de periodistas muertos dos días después de que las policías de Suecia y Dinamarca hicieran público que acababan de frustrar un atentado contra el periódico Jyllens Posten, que en 2005 desencadenó una serie de protestas en todo el mundo tras la publicación en sus páginas de unas caricaturas del profeta Mahoma.

Por lo que se refiere a otros lugares, la FIP sitúa a Pakistán en cabeza de la lista de las zonas más peligrosas para los periodistas en 2010, por delante de México, Honduras e Iraq.

«La cifra de casi un centenar de periodistas asesinados es una pérdida muy elevada, que debería provocar la reacción de los gobiernos de todo el mundo para proteger mejor a los profesionales de la información», ha dicho Jim Boumelha, presidente de la FIP, quien añadió: «El número de incidentes y asesinatos relacionados con situaciones de conflicto es tan revelador, por las pérdidas de vidas de empleados de los medios y periodistas este año y en todo el mundo, que pone de relieve el gran peligro que existe, simplemente, por practicar hoy el periodismo».

La lista de la FIP sobre asesinatos relacionados con el trabajo periodístico ha sido coordinada con el Instituto Internacional de Seguridad de las Noticias (INSI, según sus siglas en inglés). Contiene un total de 94 nombres de periodistas y empleados de los medios muertos en 2010, por debajo de la cifra de 139 incluidos en la lista de 2009.

La FIP afirma que la mayoría fueron víctimas de actos de violencia debidos a la guerra contra la insurgencia en Pakistán, al conflicto del narcotráfico en México o a la inestabilidad política en Honduras. En dichos países, y en otros como Somalia, Filipinas e Iraq, el dominio de los violentos y la debilidad gubernamental para proteger a los periodistas crean un clima de asedio y desesperación.

«En muchos lugares y una vez más, las amenazas a los periodistas y la sombra de la impunidad oscurecen el mundo del periodismo», ha dicho Aidan White, Secretario General de la FIP: «Los gobiernos deben actuar sin dilación para capturar a los asesinos y para hacer más segura la práctica del periodismo, no sólo para los que lo ejercen, sino también para defender a la democracia».

Hasta el 31 de diciembre, la FIP ha anotado la información siguiente sobre periodistas y empleados de los medios asesinados en 2010:

Muertes intencionadas y homicidios accidentales: 94
Muertes accidentales: 3
Total de muertes: 97

La región más mortífera, por tercer año consecutivo, fue la de Asia-Pacífico, con 38 periodistas y empleados de los medios asesinados. Pakistán encabeza el listado con una cifra de 15 muertos. Todas las regiones del mundo sufren las amenazas, incluida Europa, donde el miércoles 28 de diciembre el jefe del Servicio de Seguridad de Dinamarca afirmó que habían detenido a cinco sospechosos por planear un asalto contra un periódico danés «similar al acontecido en Bombay», refiriéndose al ataque de 2008 en el que varios hombres armados provocaron la muerte de 163 personas.

Otros países con gran número de víctimas son:
México: 10
Honduras: 10
Filipinas: 5

En 2009, Filipinas, México, Pakistán y Rusia fueron los países más peligrosos del mundo, por ese orden. El informe completo de la FIP sobre los periodistas y personal de los medios asesinados en 2010 será publicado a mediados de enero de 2011.

La lista de periodistas y personal de los medios asesinados en 2010