El Gobierno no espera a definir en el parlamento el modelo de servició público e impulsa un plan economicista y centralista para RTVE
La propuesta sobre la dimensión futura de la plantilla de RTVE, hecha pública por la SEPI este viernes, demuestra definitiva y claramente la intención del gobierno del PSOE de destruir para siempre la radiotelevisión pública estatal que no podrá mantener una programación competente y de la calidad en sus nueve canales de televisión y cinco de los seis actuales de radio si prescinde del 40% de sus profesionales. Adicionalmente, la SEPI certifica la actual invasión de productoras privadas en lo público al asignar a la futura RTVE «el mantenimiento del número de horas emitidas de producción propia». Si no se produce una rectificación en profundidad de estos proyectos, el gobierno Zapatero habrá sucumbido ante los sectores más liberales, internos y externos, y desmantelará un servicio público esencial en una democracia avanzada, además de ceder ante un centralismo contrario a las negociaciones estatutarias en curso, que ignora la misión de RTVE de difundir las culturas y las lenguas de las diversas comunidades. La sociedad española habrá dado un paso atrás considerable e irreversible, también en relación con los países más importantes del entorno europeo.
Por ello es necesaria la movilización contundente de los trabajadores de RTVE, el apoyo de los sindicatos y colectivos del sector, y también de la sociedad que financia el servicio público que la propuesta de la SEPI y del Gobierno pone en peligro de muerte.
10 de marzo de 2006