Como en cada campaña electoral, el Sindicato de Periodistas de Catalunya ha pedido entrevistas a las cabezas de lista de las candidaturas con posibilidades de obtener representación parlamentaria, por interrogarlos sobre los principales problemas de la profesión periodística y del sector de la comunicación, y por emplazarlos a definirse sobre los más importantes y que guardan relación con la actividad legislativa.

Aclarando de entrada que sólo uno de los cabezas de lista, Joan Saura, se reunió con nuestros representantes, y que el PP no respondió a nuestras peticiones, el resto de encuentros se hicieron con diputados de los partidos correspondientes que forman parte de las listas electorales.

Por parte del SPC, planteamos la necesidad que la nueva Ley de la Corporación Catalana de Radio y Televisión sea de las primeras, o la primera, a ser abordada y aprobada en la nueva legislatura. Petición que fue respondida afirmativamente en el caso de PSC, ERC y ICV-EUiA, aun cuando lo relacionaban con el resultado de las elecciones y con el impulso que diera el nuevo gobierno. CIU, que reconoció que no dio salida a la Ley en el mes de julio por razones de táctica política, remitía a estas mismas razones para favorecer o no la aprobación de la Ley en el nuevo marco político.

En lo que se refiere al otro tema lacerante, el futuro de los centros de RTVE en Catalunya, y concretamente de su programación en catalán, que en el caso d’RNE significa la supervivencia o no de Ràdio 4, las respuestas fueron más de principio, pero sin garantías claras de poder influir en el desarrollo de los hechos. CIU, ERC e ICV-EUiA se mostraron partidarios de defender esta programación, y los representantes del PSC la daban por supuesta y remitían a unas garantías que se les había dado que Ràdio 4 no desaparecería, pero sin ningún dato concreto de cómo se haría.

El SPC recordó a las cuatro formaciones políticas que hacía falta profundizar en la valoración de las garantías laborales como requisito a la hora de la concesión de licencias radiotelevisivas, como ya se ha hecho en gran medida en el caso de la TDT privada, que recogió propuestas hechas desde el sindicato. Y también que los criterios de estabilidad laboral y derechos profesionales deben seguirse también en las radiotelevisiones locales (en la línea de lo planteado a la Ley del Audiovisual y de la aparcada Ley de la CCRTV). Y volvimos a insistir en el problema estructural de la ocupación gratuita de puestos de trabajo por parte de los estudiantes en prácticas, a los cuales se utiliza más que no se forma por parte de las empresas.

Barcelona, 30 de octubre de 2006