La Federación Internacional de Periodistas (FIP), a la que pertenece el SPC, ha expresado en un comunicado su profunda consternación por la enorme tragedia que vive el pueblo de Haití tras el devastador terremoto que sacudió ayer al país más pobre de América Latina, dejando un número aún incuantificable de víctimas y la destrucción casi total de la infraestructura física de varias ciudades.

La FIP se une a la llamada mundial de solidaridad para con el pueblo haitiano, en momentos en que las catastróficas consecuencias del terremoto tienden a agravarse rápidamente por la inexistencia de centros hospitalarios, la ruptura de las comunicaciones y todo tipo de carencias sanitarias y alimentarias.

«Se necesita una inmensa movilización mundial de solidaridad con el pueblo haitiano para evitar que otro gran número de ciudadanos vea en riesgo sus vidas por la imposibilidad de satisfacer las necesidades más elementales», señala Gregorio Salazar, director de la Oficina Regional de la FIP para América Latina.

La Oficina Regional de la FIP en Caracas en contacto con nuestro afiliado en República Dominicana, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), está tratando de conocer la suerte de los colegas periodistas haitianos y de corresponsales internacionales destacados en la zona, pero las comunicaciones son casi inexistentes.

Olivo De León, secretario general del SNTP, dijo que la tragedia ha sacudido hondamente al pueblo dominicano, por los lazos de hermandad con Haití y porque muchas víctimas son de nacionalidad dominicana.

«Lamentablemente, hasta ahora no hemos podido establecer contacto con nuestros colegas haitianos, con quienes íbamos a tener un encuentro en los próximos días, pero sabemos por el personal de nuestra embajada en Puerto Príncipe que el caos es total, no hay comida ni medicamentos. Las calles están llenas de víctimas fatales y de gente desesperada».