La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) expresa su «rotundo rechazo a la reforma del mercado laboral» aprobada por el Gobierno central al considerar que «no servirá para crear empleo, abarata el despido, recorta derechos de los trabajadores en beneficio de los empresarios y, además, es injusta porque hace recaer la crisis sobre los más débiles mientras protege a quienes la han provocado».

Así lo expresa en un comunicado en el que considera que una de «una de las medidas más graves» es permitir a las empresas hacer un ERE «sin necesidad de que previamente lo apruebe la autoridad laboral». Para la FeSP esto supone que «cualquier empresario puede despedir parte de su plantilla cuando tenga pérdidas o disminuyan sus ingresos durante nueve meses». Una reforma que tendrá una especial incidencia en los medios de comunicación, sector en el que se han perdido 5.000 puestos de trabajo en los últimos tres años, «sólo servirá para que los empresarios puedan despedir con un coste menor». El comunicado añade que «la supuesta intención de contratar a jóvenes será utilizada por muchos de ellos para incrementar aún más la ya alarmante precariedad que se vive en este sector. Esto repercutirá negativamente en el trabajo de los periodistas y, en consecuencia, también afecta el derecho fundamental a la información que tiene la ciudadanía».

El comunicado hecho público por la FeSP recuerda que la reforma aprobada el viernes «generaliza el despido improcedente con 33 días de indemnización por cada año trabajado y un límite máximo de 24 mensualidades -en lugar de los actuales 45 días actuales hasta 42 meses- , permite que las empresas no aplican el convenio colectivo de su sector cuando atraviesan por dificultades económicas y acuerda que las empresas de trabajo temporal (ETT) puedan actuar como agencias de empleo, en lugar de potenciar el Servicio Público de Empleo (el antiguo INEM) para que cumpla esta función».