Recuerda que la Comisión Europea reconoce los derechos de los periodistas como autores, y no sólo los de los editores como pretende la AEDE

Ante la próxima reforma de la Ley de Propiedad Intelectual (LPI), la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) pide al Gobierno que esa futura norma legal sea inequívocamente clara en su redacción, para no dar pie a distintas interpretaciones, y justa en su formulación. Para ello, el Ejecutivo debe tener en cuenta la situación especial de los periodistas, cuyos derechos de autoría no se han reconocido hasta ahora en España, y hablar con ellos y con otros autores antes de reformar esa ley.

En las conversaciones que se espera inicie el Ministerio de Cultura para reformar la LPI deben estar presentes las organizaciones representativas de todos los sectores afectados, entre ellas la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), que representa a miles de trabajadores de medios de comunicación que han elegido con su voto a comités de empresa y delegados de personal de esta organización.

Por ello, la FeSP pide al Gobierno:
– Que en la ley quede meridianamente claro que los únicos autores de los artículos e imágenes periodísticas son sus autores, como lo demuestran tanto la lógica como la semántica. Únicamente con esa claridad se evitarán conflictos legales como los que ha generado la deficiente, y en algunos aspectos errática, ley actualmente en vigor.
– Que el Ejecutivo atienda las recomendaciones de la Comisión Europea, que reconoce los derechos de los periodistas como «autores» de los trabajos que elaboran, y los de los editores por el «papel importante» que desempeñan en «la difusión» del trabajo de escritores, periodistas, fotógrafos, investigadores, científicos «y otros autores».
En su informe de mayo de 2011 sobre un mercado único europeo de la propiedad intelectual, la Comisión Europea considera que proteger los derechos de autor de los periodistas es «esencial» para que exista un periodismo independiente, profesional y de calidad. Por eso, la FeSP sostiene que los editores, como propietarios de las plataformas de distribución de la información creada por los autores –en el caso de los medios de comunicación, los periodistas–, deben ver reconocida y compensada esa actividad, pero no por encima de los derechos de los autores.
– Para una tramitación justa y razonable de esta reforma legal, es imprescindible que se cuente con la opinión de los sindicatos, y específicamente con los integrados en la FeSP, ya que se trata de un derecho de autoría que no deriva de una actividad intelectual especulativa sino que está totalmente vinculado a la actividad laboral de su autor, cuyos intereses representan legalmente los sindicatos.
– Que esta especial característica debe ser contemplada en la reforma de la LPI, explicando con absoluta claridad que no se trata de la denominada «obra colectiva», solo aplicable a otro tipo de ediciones para las cuales fue creada esta figura, sino de una «obra en colaboración». Por este motivo, se deben determinar los derechos que corresponden a los autores y a los editores.
– Que la reforma de la LPI no deje al margen a ninguna de las nuevas plataformas de difusión de la información periodística.

A la vista de experiencias anteriores con esta ley, la FeSP pide al Gobierno y al Poder legislativo que actúen con la responsabilidad que de ellos se espera, sin ceder a presiones de determinados grupos empresariales que pretenden arrogarse para ellos derechos que corresponden a los autores. Solo así tendremos una Ley de Propiedad Intelectual que regule con justicia los derechos de todas las partes implicadas y no perjudique a ninguna.

19 de marzo de 2013