Hace un llamamiento al Parlamento andaluz para que nombre por consenso al director de RTVA y mantenga el modelo de radiotelevisión pública y de calidad
La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) lamenta que el Gobierno haya aprobado una reforma de las jubilaciones parciales y anticipadas que castiga, sobre todo, a los trabajadores mayores de 55 años y a los que están próximos a la jubilación, que están siendo las principales víctimas de los despidos colectivos tanto en las empresas públicas de comunicación como en las privadas. El Ejecutivo de Mariano Rajoy puede revisar la regulación de estas materias para mejorarla y acomodarla a la situación actual, pero debe hacerlo sin castigar a las personas afectadas y manteniendo sus derechos conquistados durante años.
Además, el Gobierno ha vulnerado una vez más el Pacto de Toledo y ha optado por utilizar un decreto ley para aprobar una medida de tanta trascendencia como esta –ya lleva 35 decretos en sus 14 meses de gobierno-, en vez de dialogar y negociar con la patronal y los sindicatos.
Asimismo, la FeSP hace un llamamiento a los grupos del Parlamento de Andalucía para que busquen un candidato consensuado para la dirección general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), manteniendo el actual modelo de radiotelevisión pública y sin caer en la tentación de modificar la ley para permitir una elección de ese cargo sin consenso, como ha hecho el Gobierno de Mariano Rajoy.
La Junta Ejecutiva Federal de la FeSP, reunida este fin de semana en Madrid, también ha acordado expresar su rotundo rechazo hacia la decisión de la empresa Pescanova de obligar a uno de sus clientes a despedir a un trabajador, en represalia por la información que la esposa de este, delegada del diario Expansión en Galicia, ha escrito sobre esa compañía pesquera. Decisiones de este tipo eran habituales durante la dictadura franquista, pero no son de recibo en una sociedad democrática.
La FeSP se solidariza con los trabajadores de la Televisión de Catalunya (TV3) en la lucha que mantienen contra el cierre de sus delegaciones territoriales, y con los del Grupo Zeta, amenazados de despido en un ERE en la imprenta. La misma solidaridad mostramos con los trabajadores del Grupo Intereconomía, del Diario Menorca y de otras empresas que están sufriendo despidos.
17 de marzo de 2013