Ante las crecientes opiniones y solicitudes de ayuda a los medios afectados por la crisis económica, la Federación de Sindicatos de Periodistas (FEP) recuerda las advertencias que, en ese sentido, ha formulado la Federación Europea de Periodistas (FEP); órgano regional de la FIP, a la que pertenece la FeSP. La organizacions europea de peridistas considera que la democracia no puede funcionar si los gobiernos no construyen condiciones legales y reglamentarias que permitan a los periodistas trabajar libremente y que se debe invertir en el trabajo de los periodistas y en la supresión de la precariedad social y profesional.

Así mismo ha reiterado «el derecho de los periodistas –empleados fijos o no- a trabajar en condiciones de trabajo dignas, a percibir derechos de autoría y a beneficiarse de un estatuto y un marco de reglamentación protectora como garantías de un periodismo de calidad.» Observa la FEP que «la convergencia multimedia necesita nuevos modelos de gobierno en los Consejos de la Prensa y de lo Audiovisual, así como diferentes formas de autorregulación, de corregulación o de regulaciones exigentes. La realidad de Internet convierte las estructuras actuales en modelos cada vez más obsoletos.» La FEP recomienda examinar, con los propietarios de los medios de comunicación y otros agentes, las posibilidades de mejora de las instancias de comunicación con gobiernos e instituciones.

Además, se muestra favorable a respaldar propuestas nacionales y europeas que impulsen apoyos urgentes a los medios, aunque señalando que cualquier forma de asistencia, debe estar condicionada a distintos requisitos. En primer lugar, al respeto a los criterios éticos de base, a la independencia de las redacciones y a la libertad del periodista para defender sus valores en un escenario cambiante. En segundo lugar, al respeto a los derechos sociales, sobre todo a normas y condiciones de trabajo decentes para los periodistas y el resto de trabajadores de los medios.

También debe contemplarse la necesidad de invertir en un periodismo de calidad, que promocione la diversidad y reafirme sus valores de servicio público en el seno de sistemas mediáticos plurales. Se debe seguir vigilando y registrando los cambios por los que atraviesa el sector en Europa e informar sobre sus avances. Se debe apoyar a los periodistas que sobreviven a estrategias irresponsables y de reducción de costes y promover la existencia de sindicatos fuertes, miembros de la FEP, en toda Europa, con capacidad para influir en la sociedad y, en concreto, en los jóvenes.

Estos condicionantes están formulados en el documento El periodismo en la vanguardia del cambio refrendado en la reunión reunión anual de la FEP por los 25 países asistentes y enviado el pasado mes de mayo a los miembros del Parlamento Europeo.

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