Enero está siendo un mes frío en las empresas de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales. A los efectos desiguales en los salarios que han supuesto la serie de decretos y órdenes de la Generalitat, aplicados de manera discriminatoria y en situaciones diversas en cuanto a sus convenios, se han añadido los malos augurios en relación a posibles iniciativas de reformar la Ley de la CCMA, y no en un sentido positivo aunque así se quiere disfrazar por algunas voces interesadas. En todo caso, el jarro de agua fría ha llegado en el encuentro de la dirección de la Corporación y representantes de los diferentes comités de empresa el 19 de enero: los convenios firmados, el de TV3 y el de Activa Multimedia, no se podían aplicar en el apartado económico ya que partir de ahora los sueldos quedan congelados en todas las empresas. En Catalunya Ràdio este hecho puede torpedear la negociación del convenio que está en marcha, y en Interactiva la aplicación de los acuerdos que los acercaban salarialmente a CR. En el ente CCMA, además, esto se añadía al recorte del 5% que se les aplica discriminatoriamente, como si fueran la administración pública, de acuerdo con los decretos de los gobiernos central y catalán de antes de la verano.
Las razones del Presidente y del Director General de la Corporación, Enric Marín y Ramon Mateu, fueron la situación objetiva de déficit no previsto (y provocado por no haber podido ingresar partidas comprometidas con la Generalitat), que imposibilita firmar el acuerdo ya pactado entre comité de empresa de TV3 y el Consell de Govern de la Corporación, que incluye una cláusula según la cual es necesario el visto bueno del Govern, que finalmente no se ha producido. Y lo mismo sucede para el pacto de Activa Multimèdia. La dirección de la Corporación ha querido insistir en la transparencia de la información, en el compromiso alternativo de mantenimiento de los puestos de trabajo y de la producción propia, pero auguró más sacrificios en el futuro causados por el «cambio de paradigma» que se ha producido, entre otras cosas por el cuestionamiento sistemático, desde determinados sectores, de los medios públicos. Ha planteado un gran acuerdo para pactar la crisis que los representantes de los trabajadores reclamaron que se llene de contenido para ser viable, y que ha quedado a la espera de nuevas reuniones entre la CCMA y la Secretaría de Presidencia, de la que depende, y de la reflexión que deben hacer los comités de empresa y los trabajadores, convocados en diferentes asambleas.