Con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa, periodistas españoles se concentraron ante el Centro Internacional de Prensa de Bruselas, convocadas por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), para denunciar la «grave crisis» del sector periodístico español y las «restricciones a la libertad de prensa». Los manifestantes hicieron un llamamiento a los poderes públicos y la sociedad para que «defiendan y promuevan la libertad de prensa, como garantía imprescindible de la democracia».

Bajo el lema «Sin Periodistas no hay periodismo. Sin periodismo no hay democracia» se leyó un manifiesto en el cual la FAPE denuncia las «restricciones a la libertad de prensa como la existencia de contratos de trabajo leoninos y las ofertas de empleo indignas» o la «negativa de los gobernantes a asumir públicamente las explicaciones ante los ciudadanos».

A la convocatoria se sumaron, entre otros, el secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), Dardo Gómez, y el consejero del Comité Ejecutivo de la Federación Internacional de Periodistas (FIP) Paco Audije.

Luis Menéndez, miembro del Comité Ejecutivo de la FAPE, subrayó la «devastación de la profesión» periodística que se vive en España y recordó que en los últimos cuatro años se han perdido unos 6.000 empleos en el sector.

Por su parte, Dardo Gómez denunció el uso de la crisis económica como una «excusa» para la «degradación» del periodismo y expresó su preocupación por el futuro de los medios públicos en España tras las últimas decisiones del Gobierno sobre TVE.