Como candidatura abierta y plural no queremos volver a las polémicas sobre la estrategia seguida los últimos años por las diferentes fuerzas sindicales, sino mirar adelante con el objetivo de garantizar el servicio público de calidad que debemos ofrecer, que es también la garantía de nuestros puestos de trabajo.
Pero defender el papel y la viabilidad de TV3 no se puede hacer a cualquier precio, sino que requiere unas condiciones laborales y profesionales dignas y ajustadas a la realidad.
Esto quiere decir que si la CCMA pasa por dificultades económicas, la salida no puede volver a recaer en los asalariados que nos esforzamos día a día para asegurar el derecho de la ciudadanía a la información y en una programación digna.
Porque no podemos olvidar los últimos cuatro años, los más dolorosos de nuestra historia, con direcciones que no han hecho una buena gestión, pero que para hacer cuadrar los números han optado por la salida fácil, que es recortar los sueldos de los trabajadores.
Además, el año pasado, y siguiendo las directrices del Gobierno de la Generalitat, el actual Consejo de la Corporación presentó un ERE/PAC agresivo, que desmantelaba el modelo de radiotelevisión pública de servicio, y que sólo por la combinación de las potentes movilizaciones de la plantilla con la estrategia seguida por los negociadores en representación de los trabajadores se pudo reconducir y conseguir reducir las consecuencias más brutales.
La respuesta de los trabajadores y la estrategia negociadora mayoritaria también han permitido ganar tiempo ante la planificada ofensiva del Gobierno, y han abierto la puerta a poder acordar paritariamente con la dirección temas históricamente pendientes, como la regulación de todos los sueldos dentro del Convenio, la detección de sueldos y complementos irregulares, y la definición y valoración de los trabajos y responsabilidades hasta ahora excluidas del Convenio colectivo.
En cuanto al futuro próximo, nada apunta que las negociaciones del convenio se sitúen en las mismas coordenadas que antes del verano, ni que sea por los efectos del tema del IVA en la situación económica de la Corporación. Y también por la fluidez de la situación política que determina en gran parte el momento de tregua que vivimos, que se puede prolongar debido al papel comunicativo central que juega TV3 en el contexto del conflicto político actual.
Más allá de esto, nuestra lista quiere defender nuestra profesionalidad, amenazada también por directrices a veces ineptas y otras muy intencionadas, que amenazan la posibilidad de poner nuestro trabajo al servicio de la sociedad, como corresponde a un medio público, es decir, de toda la ciudadanía.
No aceptaremos medidas que troceen artificialmente categorías como la de redactor, polivalente por definición, con valoraciones y remuneraciones de primera y de segunda. Reclamamos la equivalencia entre redactores y ENG, y la revalorización de los OPIs y de los lingüistas para situarlos al nivel de la importancia de su tarea. Y habrá que atender otras reclamaciones que se han planteado.
Rechazamos la imposición de las corresponsalías unipersonales, hechas sólo con criterio de ahorro económico y sin hacer un balance de sus efectos negativos sobre la calidad del producto informativo. Y rechazaremos también todos los pasos que se den en dirección a la confluencia de redacciones que no sean discutidos y acordados con los representantes laborales y profesionales de los trabajadores.
Las elecciones del 16 de octubre son el mecanismo democrático que tenemos los trabajadores para escoger nuestros representantes al comité de empresa. En momentos de conflicto latente como los actuales, una gran participación también es una manera de decir a la dirección y al gobierno que queremos lo que es nuestro, que continuaremos luchando por el mantenimiento de la plantilla y de la producción propia, que no admitiremos más rebajas ni de sueldo ni de las condiciones laborales y que sin nosotros la empresa y el servicio público de comunicación no tienen futuro.
Un futuro que también reclama que se vuelva a reformar la Ley de la CCMA, no sólo eliminando la contrarreforma impulsada hace dos años por CiU con el apoyo del PP, sino yendo más allá y garantizando la plena desgubernamentalización y la despartidización de los órganos directivos de los medios de la Corporación. Esto, sin duda, debe comportar más participación social y de los representantes de los trabajadores en el control y la gestión de la programación de TV3.
Por todo esto os llamamos a votar el 16 de octubre y también que lo hacéis por nuestra lista. Entre muchos haremos mucho más.
VÓTANOS Y VÓTATE
Sant Joan Despí, 7 de octubre de 2014
https://www.facebook.com/people/llista-spc/100007850028501
https://twitter.com/hashtag/llistaSPC?src=hash