El Ayuntamiento de L’Hospitalet ha impulsado cambios en la Farga de l’Hospitalet, la sociedad que gestiona todos los medios de comunicación que dependen de este consistorio (radio, televisión, Diari de L’Hospitalet y www.canal-h.net), con unos criterios que contradicen los principios que los partidos que gobiernan el municipio defienden en sus programas electorales y que han anunciado que incorporarán a las reformas legislativas en marcha que hay en Catalunya y en España. La principal novedad estriba en la creación de la figura del consejero delegado para los medios de comunicación de La Farga. Este hecho contradice el principio de desvincular los medios locales de la dependencia orgánica del gobierno municipal, porqué entre las atribuciones que se le han dado hay las de «regular, controlar y modificar los contenidos» de estos medios.

Se da la circunstancia de que la persona designada para hacerse cargo de la consejería delegada ha abandonado el Ayuntamiento de l’Hospitalet, lo que implica que, justo después de ocuparlo, la plaza ya este vacante. En este sentido, en el pleno municipal celebrado el 22 de diciembre, el alcalde, Celestino Corbacho, afirmó que la vacante quedaría, de momento, sin cubrir. Pero la decisión de crear esta nueva figura y las atribuciones que se le otorgaban provocó las quejas de los partidos de la oposición. La portavoz del grupo de CiU, Meritxell Borràs, dijo que se había nombrado «un comisario político» y que «volvía la censura al más puro estilo del No-Do franquista». En un intento de salir al paso de las críticas, el presidente del consejo de administración de La Farga, Clemente Murillo, asseguró que «no se pretende censurar la labor periodística» y que el matiz que CiU veía a la frase de «regular y controlar» no responde a la realidad. Debe destacarse finalmente que los cambios introducidos en el funcionamiento de los medios de comunicación se hacen sin esperar que se elabore el reglamento sobre medios de comunicación que antes de acabar el año debía presentar La Farga a instancias del pleno municipal.

El SPC considera que esta situación es totalmente inoportuna desde el punto de vista de una gestión democrática y plural de los medios de dependencia municipal. Éste es uno de los efectos perversos del injustificable retraso -pasado un año de las elecciones catalanas- en la elaboració de la Ley del Audioviusal y en la reforma de la CCRTV para garantizar la independencia, la neutralidad y la profesionalidad de los medios audiovisuales, empezando por los públicos, principios que son igualmente válidos para el resto de medios. El sindicato hizo público el pasado 12 de diciembre un comunicado en el que criticaba estos nombramientos en la Farga de L’Hospitalet (que se puede consultar íntegramente en la página web, www.sindicat.org. Para el SPC, las propuestas de reforma democrática de los medios de comunicación hechas por el presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero son igualmente válidas para los que son de ámbito local. Por esta razón, el SPC reclama a los gobiernos municipales que impulsen modelos de gestión y de control democráticos y abandonen les prácticas desarrolladas ahora por el Ayuntamiento de L’Hospitalet, pero que, desgraciadamente, se pueden generalizar a muchos municipios de Catalunya.