Los trabajadores de los diarios portugueses A Capital, de Lisboa, y O Comércio de Porto, que fueron cerrados a finales del pasado mes de julio por sus propietarios -la empresa española Prensa Ibérica, también conocida como Grupo Moll-, han decidido constituirse en cooperativa para que vuelvan a ser publicados. La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) celebra esta decisión y lamenta que una empresa española haya cerrado los dos rotativos sin buscar antes soluciones que les permitieran seguir en el mercado y que los trabajadores sí que han encontrado. Prensa Ibérica es el grupo de prensa regional más importante en España, con más de quince cabeceras entre las cuales cabe destacar El Faro de Vigo, Levante, Diario de Mallorca, La Nueva España, La Opinión -en varias provincias-, y, entre otras, en Catalunya, el Diari de Girona. A pesar de tanta experiencia en la edición de diarios, no ha dudado en cerrar de la noche a la mañana dos rotativos portugueses y dejar en la estacada a más de 150 trabajadores, hecho que perjudica las posibilidades de inversión de otras empresas españolas en Portugal.

La FeSP y el conjunto de sindicatos que la integran impulsó una campaña de apoyo a los colegas portugueses víctimas de la soez actuación del Grupo Moll, quien ha hecho recaer la responsabilidad de los problemas económicos de las empresas en los trabajadores, que siempre son quienes las pagan y nunca repercuten en quienes las gestionan. Los trabajadores de los dos diarios cuentan con el apoyo del movimiento cooperativo portugués y ya han recibido propuestas de varias personas e instituciones para participar en el accionariado.